Querido
padre:
Hola papá, son muchas las cosas que quisiera
decirte y pocas las palabras que encuentro para expresarlas…
No sé si serás el mejor padre del mundo, lo
único que sé es que sí eres el mejor que pudo tocarme. A veces dejamos pasar el
tiempo sin expresar lo que sentimos el uno por el otro, pero ya no quiero que
pase un día más, quiero expresártelo hoy, ahora.
En un segundo vienen a mi memoria las muchas e
innumerables cosas que has hecho por mí, recuerdo cuando me llevabas de la mano
y nos hacía tan feliz estar juntos, gracias por ser mi cómplice de travesuras,
gracias por consentirme tanto, y aún más, gracias por aquellos momentos en los
que enfermé y estuviste ahí cuidando de mí y procurando que estuviera lo mejor
posible.
Gracias por apoyarme en las decisiones que he
tomado y por estar siempre a mi lado, gracias papá, te amo profundamente.
Te quiero papá, gracias por ser siempre un
gran apoyo para mí.
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